Bebé como medio ofensivo y dando el nivel que dio el año pasado es de cárcel no creer en él y pensar que no volverá si Mendilibar confía en él. Pero resulta que Rubén Peña y Escalante y compañía le está ganando la tostada en estos primeros partidos de Liga. Seas de bebés o no, te gusten o no los niños, seas más de Cola-Cao que de Nesquik, qué opinas de que merezca la pena o no seguir confiando en Bebé tanto para alinearlo como para mantenerlo por si en el futuro saca el espíritu rayista y nos deleita con su fútbol potente y directo del año pasado. En ese caso tendré a una perla en bruto que me dará goles y puntos a más no poder. En el caso en que no tenga regularidad o no juegue tendré un buen portero de discoteca de metro noventa o un buen segurata para el bar que voy a montar con Unui poniendo copas y Adrián González de gogó. No todo va a ser negativo.